Es de todos conocido que los humanos buscamos la felicidad en la tierra (cada uno en la medida de sus posibilidades, tendencias e influencias). Hay una frase de Keats que dice: "La belleza es verdad y la verdad, belleza. Esto es todo lo que necesitas saber sobre la tierra". La búsqueda de la belleza, y por tanto de la felicidad a través de ella, sublima parte de nuestras vidas y nos lleva muy a menudo por caminos tortuosos y difíciles de alcanzar, haciendo que nos preguntemos si realmente el camino mereció la pena. Felicidad y verdad. Una de nuestras necesidades fundamentales para realizarnos como personas y construirnos a nosotros mismos consiste en alcanzar la verdad, nuestra verdad. Una vez alcanzada, construimos y evolucionamos, organizamos nuestra vida en torno a ella. Y no hay nada más cierto que las verdades particulares se alcanzan a partir de experiencias interiores que marcan y nunca se olvidan. Y que esos estímulos a partir de los cuales se dispara el proceso tienen que ser lo suficientemente fuertes, potentes e importantes como para apoyar la marca indeleble que nos acompañará, en muchas ocasiones para siempre. Keats lo dice bien claro: La belleza es certeza, la verdad es bella. Por ello todo lo hermoso nos conducirá a cierta verdad, y por eso la belleza nos es tan importante.
Toda esta reflexión viene al hilo de la censura por parte de ciertos retrógados (no sé si hay un vocablo más acertado), de un blog de un compañero (Dani Serrano; http://eldeiliplanet.blogspot.com/), por colgar un dibujo (realmente hermoso, espectacular, realizado en una convención de comics a un fan) realizado por Adam Hughes, de una Dejah Toris desnuda (un dibujo que encontré en Comic Art Fans, y que yo mismo colgué hace unos días en el blog). He estudiado Arte e Historia, soy un apasionado del arte en todas sus formas, desde la antigüedad clásica en adelante, y he desarrollado una sensibilidad a mi entender, nada basta ni desagradable. Por lo general cualquier exceso de mal gusto me repele, y sólo aquello que es sutil, aun mostrando claramente lo que hay, llama mi atención. Adam Hughes puede ser un dibujante que exagera los atributos naturales femeninos, pero siempre mantiene un gran nivel en la ejecución de su arte, y destaca precisamente por la sensualidad de sus obras. Sensualidad es lo contrario a mal gusto, precisamente, y en concreto en dicho dibujo, la figura simplemente es mostrada. No hay ninguna pose agresiva ni excesivamente sugerente (tampoco tendría problemas con ello, sinceramente).
Lo próximo que espero no encontrarme es el blog censurado por colgar estos hermosos cuadros de obras clásicas mostrando mujeres desnudas. Alguien podría decir que lo que hace Adam Hughes es muy distinto a lo que los autores de estas obras hicieron, y tendría razón. Son distintos autores, distintas temáticas y distintas técnicas. ¿Deberían ser iguales?¿Mereceríamos ser humanos si nos limitásemos a repetir lo que otros han hecho?Si precisamente tenemos una razón para existir, esta sería la de mostrar nuestra creatividad y amor por el arte,en cualquier campo. Y además...¿Acaso dichas obras no han sido en uno u otro momento criticadas también por mostrar lo que según algunos no debería ser mostrado?Creía que ciertas tendencias habían sido de alguna forma educadas y suavizadas, pero me parece que siempre habrá algún borrico suelto por ahí...
¡Un abrazo al compañero Dani!
Muchas gracias por el apoyo, compañero :)
ResponderEliminarNada más que agregar, sobran las palabras.
ResponderEliminarDe nada!Un placer, de verdad. Y a seguir blogueando!!!Eso lo primero.
ResponderEliminarExcelente artículo Javi, y estamos contigo compañero!
ResponderEliminarLa verdad es que es lamentable lo que le han hecho al blog de dani serrano.
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