Pocos autores son capaces de sumergirte por completo en la lectura de sus obras, y pocos son capaces de dotar a las tramas de verosimilitud pese a la frugalidad de detalles.
McCarthy crea en La Carretera una lectura inquietante, casi teatral, en la que la tensión ambiental es otro personaje en sí mismo.
En un mundo golpeado por una crisis ecológica sin precedentes, sin vida vegetal ni animal y cubierto de cenizas por completo, un padre y su hijo luchan por sobrevivir a sí mismos, al dolor, al hambre y a la propia decadente, despiadada y olvidada Humanidad restante.
Pese a su no extensa longitud, golpea tan fieramente que uno no consigue desembarazarse fácilmente de su tristeza y sordidez.
Una lectura más que recomendable si tu salud mental no necesita de excesivos estímulos positivos para recuperarse de su potencia.
McCarthy crea en La Carretera una lectura inquietante, casi teatral, en la que la tensión ambiental es otro personaje en sí mismo.
En un mundo golpeado por una crisis ecológica sin precedentes, sin vida vegetal ni animal y cubierto de cenizas por completo, un padre y su hijo luchan por sobrevivir a sí mismos, al dolor, al hambre y a la propia decadente, despiadada y olvidada Humanidad restante.
Pese a su no extensa longitud, golpea tan fieramente que uno no consigue desembarazarse fácilmente de su tristeza y sordidez.
Una lectura más que recomendable si tu salud mental no necesita de excesivos estímulos positivos para recuperarse de su potencia.
Novela fascinante y desgarradora que golpea a los lectores con fuerza.
ResponderEliminarMe alegro de que la hayas disfrutado.
¡Saludos, Javi!
Totalmente de acuerdo. Cormac McCarthy me encanta. Su forma de escribir es tremendamente particular. Sin florituras. Seca.
ResponderEliminarYo suelo coger los libros de la biblioteca pero ésta y otras novelas de este autor las tengo.
Felicidades por la reseña.
Mike:
ResponderEliminarPor lo que dices también tú la has disfrutado.
Un saludo.
Anónimo:
Me alegro de que te haya gustado el pequeño post.
Leeré más del autor, aunque ahora estoy con Asimov.
Muy acertado también tu comentario acerca de su forma de escribir.