Otra lectura imprescindible, maravillosa, absorbente, de un primerizo Jaime Martín, que ya en los años ochenta y en una de sus primeras horas, mostraba más que maneras para narrar y crear personajes interesantes y con gancho, amén de mostrar una realidad social que había que saber.
Barcelona, un grupo de jóvenes adolescentes que vive en una barriada en la que los trapicheos, las drogas, y los primeros contactos no demasiado recomendados están al alcance de la mano.
El ritmo de la historia, cómo se desarrollan tanto ésta como los protagonistas, su vida interior, esa evolución que se mezcla con la inercia de la vida y las costumbres que van creando...
Martín era ya entonces un maestro para captar la atención del lector...Hayas vivido algo similar o simplemente si la historia te pilla muy de refilón por haber vivido esa época y visto aun de lejos o por las noticias ese ambiente, esos pequeños detalles...te atrapará sin duda. Y a los que no, apostaría a que también.
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