De todas las miniseries relacionadas con los famosos personajes creados por Moore y Gibbons seguramente sea esta -guionizada y dibujada por Darwyn Cooke-, la que a priori despierte más atención y más espectativas entre el fandom, puesto que el reputado autor no ha hecho más que producir obra tras obra de calidad en los últimos años.
Visto lo visto en la primera entrega, no se queda atrás. Pocos autores
serían capaces de tomar el aire, el ambiente y las características de una magna obra como Watchmen para llevarlo a su terreno y triunfar en el intento, y Cooke acierta desde la primera viñeta.
Con Hollis Mason como protagonista narrativo, una puesta en ambiente soberbia y una perfecta caracterización de los miembros del grupo, Cooke sabe cómo transmitir cariño, repulsión, admiración, y tristeza casi a partes iguales (según el protagonista, una mezcla de todo ello, o un sentimiento particularmente destacable en particular) hacia los personajes.
Sin leer más que la primera entrega de Silk Spectre y esta reseñada -y no sé si me equivocaré- mucho tiene que sorprenderme el resto de historias para que deje de etiquetar a estos Minutemen como la posiblemente mejor historia del relanzamiento de los personajes.
La historia de piratas de complemento (2 páginas por número, que empieza en este Minutemen 1 y continúa en el resto de miniseries) por Wein y Higgins, destacable y en la línea de la original de Moore.
Y ahora a esperar el resto de entregas...
No hay comentarios:
Publicar un comentario