Avilés tiene algo especial que se te mete bien dentro:
Son sus plazas y rincones, sus amables gentes, las amistades creadas y compartidas y el amor por la cultura y el cómic que se unen durante unos días inolvidables cada año desde hace ya diecisiete (que se dice pronto)...
Este año se comentaba que el nivel de autores no era el costumbrado de otras ediciones (cuando se pone el listón tan arriba es complicado igualarlo).
Aun con los recortes presupuestarios, las Jornadas (que no lo neguemos, han notado esta limitación) han sido interesantes y con un espectro bastante amplio de sensibilidades, tendencias y autores patrios y foráneos.
Tal vez cabría plantear el debate de si no convendría más limitar a los artistas no oficiales que se presentan al evento en bien de traer a algún autor oficial más que tenga mayor tirada e interés entre los aficionados, pero eso es algo que compete más a la organización que a los aficionados, aunque tal vez estaría bien que la comunicación fluyese entre todos para hacer de las Jornadas algo aún más nuestro (si cabe).
En cuanto a lo que fueron las Jornadas, de nuevo un 10 a la organización, que hizo con su enorme esfuerzo que todo saliese según lo planeado (pongamos entre comillas la ilusión por ver si la guía diaria conseguía salir a tiempo, pero eso es un clásico también, y tiene su aquél, como quien dice..).
Este año destacaría la maravillosa visita guiada a la exposición de Juanjo Guarnido en el CMAE por el propio autor, que acompañó con numerosos detalles técnicos cada una de las páginas y portadas allí expuestas (unas verdaderas obras de arte) y las muy y variadas charlas y encuentros con la prensa de autores. Acudí a las de Ariel Olivetti (divertidísima), Fonollosa (de nuevo con Olivetti), Guarnido y Baudoin (un artista que merece muy mucho escuchar), David López (un verdadero fenómeno con los lápices y el micrófono) y Javi Pina, Enrique Corominas (Un ARTISTAZO y MEJOR PERSONA aún), Cameron Stewart y Gary Erskine y Salvador Larroca.
Pero no todo fueron charlas: La exposición sobre originales de cómic español (gracias al coleccionista Jaume Vaquer) mostró parte de nuestra historia desde los años 40 a los inicios de los 70 del pasado siglo, y, por supuesto, estuvo el tema de los sketches de los autores, tan presentes año tras año.
Notas negativas:
Hay que reinstaurar el premio superfriki al fan desatado.
No puede ser que un mismo "fan" se aproveche del buenismo de un autor para sacarle tres dibujos mientras algún otro fan de verdad se queda sin sketch porque el primero acapara todo lo que puede. Las reglas no escritas del buen hacer deberían autolimitar las peticiones.
El caos de determinados momentos relacionado con este afán acaparador hace que algunos se dediquen a deambular en 3 filas a la vez para conseguir dibujos de todo el mundo, mientras los que hacen las cosas como debe de ser, se quedan sin esa especial dedicatoria de su artista favorito.
Siempre con material a la venta por parte de algunos (David López, Daniel Sampere, Olivetti...), dibujos de encargo (Cameron Stewart, que los hará en casa e irá mandando por correo, David López...) y cómo no, dibujos gratuitos.
Cameron Stewart se hinchó a dibujar en las terrazas, y cuando se soltó realizó obras para enmarcar, a tinta y color; también se lo trabajaron Olivetti, Jeff Lemire -genial por su facilidad para abocetar y entintar a plumilla y pincel-, Gary Erskine (superlimpio e imaginativo en sus diseños), Claudio Stassi, Juanjo Guarnido o Rafa Sandoval entre otros. Lo de Corominas no tiene nombre, sentado durante horas y horas para regalar verdaderas obras maestras a los fans...Hasta se perdió la entrega de uno de los premios en la gala de clausura por estar dibujando.
Hasta Edmond Baudoin, el considerado padre de la novela gráfica europea dibujó en las sesiones de firmas oficiales y en la plaza al aire libre (incluso en láminas sueltas, cosa que no suele ser habitual en el cómic franco belga). Larroca pasó menos tiempo (en días), pero subió igualmente a las terrazas y dibujó todo lo que pudo (estupendos dibujos acabados y detallados a lápiz).
En definitiva, y como siempre, buena comida, buen clima, buena compalñia, una excelente organización, unos artistas más que dispuestos a volcarse con sus fans y la mejor de las Jornadas de Cómic para una semana imprescindible.
En los próximos días, mucho más.
Ya queda menos para las dieciocho jornadas...
Fotos:
1-Los autores invitados el primer día en la gala de inauguración:
Baudoin, Erskine, Fonollosa, Olivetti y Stewart.
2-Stewart dibujando.
3-Exposición de Guarnido.