Hoy tenemos como invitado especial a Salvador Larroca en una pequeña entrevista en la que nos comenta cómo fue su encuentro con algunos de los artistas que más han influenciado el arte y el mundo del cómic en las últimas décadas, tanto a nivel creativo como editorial: Jim Lee, Arthur Adams y Juan Giménez.
No quiero empezar sin agradecer lo suficiente a Salvador y a Elena Merino su tiempo y su disposición siempre a colaborar. ¡Mil gracias de nuevo a ambos!
Vamos a repasar someramente un poco la trayectoria de los cuatro autores para pasar después a la entrevista:
Larroca comenzó a ser conocido en el mundo del cómic ilustrando para Planeta de Agostini (que entonces tenía los derechos de publicación de Marvel comics). Marvel UK le publicó sus primeros trabajos a principios de los 90, y ya para el mercado americano directo trabajó posteriormente en especiales y eventos puntuales, al tiempo que ofrecía su trabajo no sólo en Marvel (los títulos mutantes, los 4Fantásticos junto al Patriarca mutante Chris Claremont, con el que colaboraría también para la nueva serie de Extreme X Men; Ghost Rider) sino también en DC comics y Wildstorm.
Ganador del premio Eisner junto a Matt Fraction por su estupenda versión de Iron Man, en los últimos años ha estado trabajando para el Universo Star Wars, del que es un verdadero apasionado.
Jim Lee ha sido el hombre y el nombre por definición seguramente más influyente del mundo del cómic en las últimas décadas, sumando sus números en ventas y su labor editorial al tanto que su trabajo como dibujante. Unos primeros pasos en Marvel para Alpha Flight y Punisher dieron paso a la gloria en Uncanny X Men para posteriormente romper la baraja editorial como cofundador de Image Comics y fundador del sello editorial Wildstorm.
Posteriormente (con una breve vuelta a Marvel) pasa a DC cómics donde no sólo diseñará personajes y dibujará a los pesos pesados de la editorial, sino que ejercerá labores editoriales junto a Dan Didio, siendo uno de los jefazos de la editorial.
Arthur Adams es uno de los dibujantes de comics e ilustradores más talentosos del negocio durante las últimas décadas, trabajando tanto para las grandes editoriales mainstream como para sus propios proyectos particulares (Monkeyman and O´Brien, Jonni Future).
Autodidacta, publicó la miniserie Longshot para Marvel con tan sólo 19 años. Por su alto nivel de detalle los plazos rígidos de entrega no encajaban bien con las series regulares, por lo que sus colaboraciones se restringieron bastante en este aspecto, aunque tocó a algunos de los principales personajes de la industria: 4 Fantásticos, X Men, Factor X, Gen 13, The Authority...
Fascinado por los monstruos de la Universal, también mostró sus versiones en historias e ilustraciones de estos clásicos.
En la actualidad trabaja como portadista para Marvel (ofreciendo lo mejor de lo mejor de su trabajo de siempre) así como aceptando dibujos de encargo.
Tras un tiempo alejado de la publicación mensual en las tiendas, en la Super Comic con londinense de hace unos años comentó que había vuelto a buscar dicha presencia en las publicaciones aunque fuese como portadista porque las nuevas generaciones de lectores si no ven lo que haces no saben ni quién eres o ni siquiera que existes.
Juan Giménez, uno de los clásicos de la ciencia ficción por excelencia (especialmente por la saga de los Metabarones junto a su amigo, escritor, hombre de escena y psicomago Alejandro Jodorowsky), ha trabajado para el mercado franco belga y castellano parlante durante prácticamente cuatro décadas como ilustrador y dibujante.
Y vamos allá con la mini entrevista:
¿Qué autor de cómic te ha hecho más ilusión conocer en persona?
He conocido a Jim Lee, a Arthur Adams y a Juan Giménez, que son los que más ilusión me hacía conocer. Con Richard Corben he podido hablar alguna vez por teléfono.
¿Cómo los conociste? ¿Cómo fueron esos encuentros?
A Juan lo conocí hace muchos años. Yo era aún un chaval al que le encantaban los cómics, especialmente los suyos. Con un grupo de amigos decidí poner en marcha un fanzine y sin más, me fui hasta su casa (entonces él vivía en Madrid) para intentar reclutarle. Me atendió con muchísima amabilidad. Pasó la tarde entera conmigo. Tiempo después me lo volví a encontrar. Yo ya era un profesional. Le recordé lo agradable que fue conmigo. Puedo presumir de que hoy en día, se encuentra entre mis amigos.
A Jim lo conocí en la Comic Con de San Diego. Un editor de Wildstorm que era de su estudio nos invitó a ir a La Jolla a ver las instalaciones. Nos metieron en el despacho de Lee. Allí había un cajón lleno de muñecos de sus personajes, que yo coleccionaba. Cuando él entró, me pilló mirándolos con gran interés y me preguntó si me gustaban. Me regaló un par. También fue muy amable, nos enseñó el estudio entero. Después le he visto dos o tres veces más.
A Arthur Adams le conocí en China, en Shangai. Lo primero que me sorprendió es que él también conocía mi trabajo. Hablamos largo y tendido sobre eso. La verdad es que hicimos muy buenas migas.
¿Por qué fue tan especial para ti?
Fue especial porque son los autores que más he admirado y a los que siempre he querido parecerme.
¿Habían influenciado con anterioridad en tu trabajo o en tu manera de ser de alguna manera?
Evidentemente, yo soy autodidacta y he aprendido fijándome en los autores a los que admiraba
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