Un GRAN Expocómic es el que pudieron y pudimos disfrutar los casi treinta mil visitantes que acudimos al evento madrileño. Pese a las tremendas dificultades organizativas impuestas, el equipo habitual de nuevo se multiplicó para que todo saliese perfecto:
Un plantel interesante de autores nacionales e internacionales, exposiciones, charlas (con la novedad este año de las estupendas charlas express, de corta duración y para grupos pequeños de interesados), concurso de cosplay, espacio de sobra (dos grandes plantas del Pabellón de Cristal de la Casa de Campo), editoriales con sesiones de firmas, stands de novedades, antigüedades, merchandising, comida, material de dibujo...
La organización de las firmas, como siempre de diez, perfectas para ser complementadas en los stands de Norma, ECC o Aleta...
La Embajada de los USA brindó su stand para que los editores de DC y Marvel pudiesen entrevistar a los jóvenes talentos artísticos.
Al tiempo que se organiza el Salón, y viendo que el Pisuerga pasa por Valladolid, los almacenes Fnac aprovechan para hacer su evento en paralelo, con presentaciones, charlas y firmas durante toda la semana, repartiendo todo en varios días. Numerosos invitados a Expocómic acudieron a las jornadas, aunque también hubieron invitados en exclusiva que no acudieron al Salón del cómic. Las charlas de los autores franceses y de la presentación del último tomo de Blacksad fueron las más destacadas, con Guarnido y Díaz Canales como estrellas (Guarnido acudió desde París donde tenía presentación y exposición, llegando directo a la charla de Fnac, a la que siguieron dos sesiones de firmas en los almacenes y en el salón).
Las firmas del viernes congregaron a multitud de autores. Tantos, que no había que esperar demasiado para que otro autor te dedicase su obra tras salir de la fila anterior con otro (salvo con Paco Roca, que acumulaba continuamente más de diez personas aunque no paraba ni para respirar).
Las firmas en el Salón fueron también numerosas (seguramente más que en años anteriores) y continuas. Algunos de los autores (como Oeming) lo comentaban, encantados por el ambiente que le rodeaba.
Varios autores aceptaron Commissions (dibujos de encargo): Las que trajo Asrar (con el aspecto que Hughes da a las suyas con los rotuladores copic) resultaron espectaculares, las de Lashley y Mhan también fueron destacables, y muchos de ellos trajeron originales a la venta a precios realmente económicos (Olivetti, sketches realmente bonitos por 5, 10 y 15 euros, y páginas pintadas o dibujos trabajados a lápiz nada caros; Lashley páginas desde 20 euros, Merino con su siempre maravillosos trabajo también de oferta prácticamente...).
La Exposición de Fernando Vicente (que al final no firmó, lástima) de las pinturas para la librería madrileña Elektra fue una maravilla: pin ups de chicas y superheroínas con una calidad sobresaliente.
Y en definitiva, una oferta amplísima de autores para charlar con ellos, hacerse una foto y pedir firmas y dibujos.
Un evento estupendo, cuatro días de diversión, amistad y aficiones compartidas. ¿Se puede pedir más?
Sí, que haya otro el año que viene.
¡GRACIAS A TOD@S POR VUESTRO ESFUERZO y SABER HACER!