Una de las grandes lecturas de la infancia fue este Bermudillo que la editorial Bruguera publicó en su momento, pero del que no encontré nunca nada más que un tomo. Aun así fueron tantas las relecturas de sus aventuras que difícilmente podría haberlo olvidado.
Ahora Dolmen editorial recupera no sólo esas aventuras, sino mucho más. Ya han editado un par de tomos con el color renovado (con una mayor calidad, siendo suave y respetando la esencia de la historia y del precioso trazo de Piet Wijn). La combinación del precioso y detallado estilo de Wijn, a medio camino entre el cartoon y el realismo, fue el complemento perfecto a los guiones de Thomp Roep, con ese toque de aventuras, descubrimientos mágicos y vitales y entretenimiento puro y duro que engancha y sigue haciéndolo pase el tiempo que pase.
Un clásico que nunca pasará.
No hay comentarios:
Publicar un comentario