Prologada por una emocionada Gail Simone (a la que le encanta el mundo Templario Ratonil, que es sin duda una estupenda referencia y publicidad para la serie), llega esta segunda parte de la historia, con Víctor Santos en el apartado gráfico. Su estupendo trabajo, muy en la línea de la del guionista y creador original, Oeming, es un estupendo punto de continuidad. Su dominio de la narrativa y su efectismo tanto en la fluidez como en el estilo, marcan un punto importante en cada uno de sus trabajos.
Para los no iniciados en la historia se incluye un buen repaso a las primeras aventuras, al mundo y sus protagonistas, así como a las historias antiguas en las que han derivado las complicaciones actuales de los personajes.
Para los amantes del género fantástico y los amantes de la antigüedad, los tonos épicos y los conflictos entre órdenes religioso-soldadescos, es una buena recomendación que como poco resultará muy amena.
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