Bien hubiese querido decir que disfruté enormemente de la adaptación al cine de la famosa, vibrante y enorme historia original publicada por Marvel hace ya décadas, pero lamentablemente no fue así. La épica y la brillantez del cómic de Claremont y Byrne poco tienen que ver (salvo determinados momentos) con el resultado en pantalla.
Potente inicio en el futuro con la desesperada situación mutante, y correcto final con buenas caracterizaciones para rematar. En medio, el enorme descubrimiento de Mercurio, divertido, con una enorme fuerza.
Todo lo demás es paja insulsa y sin gracia, estirada en exceso. Una mezcla sin sentido porque lo que la franquicia mutante siempre tuvo en los comics gracias a Claremont fue que uno sentía una enorme empatía por los personajes, que uno vivía el drama de las situaciones, complejidades y conflictos que aquellos vivían como si fuesen propios. Toda la inmensa parte central de la película se lía en algo insulso y descorazonador donde ninguno de los protagonistas (y muchos son y muy buenos los intérpretes) consigue transmitir eso. Y es una verdadera pena...
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