Bart Sears y Walt Whitman

Es bien conocido por Oneyros mi debilidad por Bart Sears. Suele meterse conmigo por ello, aunque yo lo llevo con orgullo y buen humor.

Siempre solemos encariñarnos de los autores con los que hemos crecido, aunque no destaquen especialmente por sus habilidades. En mi caso, aquellos estupendos y llenos de humor números de la JLE (y JLA) de Giffen y DeMatteis siempre han ocupado un huequito especial en mi memoria. Y la parte gráfica de Sears en la rama europea del grupo fue una de las destacadas. Dueño de un grafismo tremendamente personal, barroco y en cierto modo feísta, Sears realizó una buena labor en la serie, dándole estabilidad y dotando de personalidad a los personajes. Mucho tiempo tuvo que pasar hasta que encontré algo de él que me llamase de nuevo la atención. Fue con The First, de Crossgen Comics, donde se nos narraban las vidas de ciertos dioses superpoderosos, sus batallas internas y la aparición de un sello que otorgaba poderes a cierto humano que podía rivalizar con ellos. Sears mantenía el estilo y el nivel después de tanto tiempo y las historias estaban entretenidas. No ocurrió así con el Capitán América y El Halcón, miniserie que pasó sin pena ni gloria, y Bart optó por cambiar su estilo en The Path, una serie relacionada con The First, de la que apenas llegué a leer los primeros 3 números.

Bueno, y a santo de qué viene todo esto, y cómo puede estra relacionado con uno de los padres de la poesía Norteamericana, Walt Whitman? Pues por una de las frases que escribió el bueno de Walt en su obra -reescrita y reformada en bastantes ediciones (por el propio poeta)-, Hojas de Hierba. En ella dice:

"El poeta ve con claridad cómo un artista menor puede ser precisamente tan sagrado y tan perfecto como el artista más grande".

Así que, Oneyros, intenta aportar algo que refrenda a Whitman (pero no me hagáis la comparación con Liefeld, ¡con él no vale!Jajajaa).

¡Un saludo!