La nueva serie escrita por Jason Aaron se centra en retomar y devolver al bueno de Rondador Nocturno a la vida activa (nunca mejor dicho).
Con un McGuinness en plenitud y unas historias llenas de aventura y diversión (piratas, espadas y la mejor tradición del género para el personaje), la historia se muestra como un entretenimiento ligero con precisamente dos objetivos: El que acabo de mencionar y el que escribí en el inicio de la reseña. Cumple ambos, aunque no quedará como nada más (ni menos) que eso.
En todo caso no voy a ser el que se queje en esta ocasión de que uno de mis personajes favoritos vuelva (aunque sea de la muerte) a protagonizar historias (y la excusa es razonable y creíble en cierta forma).
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