Este mes sale el spin off de la serie inicial (obra de Paul Pope), ilustrado en esta segunda ocasión por David Rubín.
La primera historia (este Battling boy) va directa al grano, sin desarrollos lentos de la trama: presenta a la ciudad de Arcópolis asediada por una hueste de monstruos que secuestran niños y comen coches.
¿Será el salvador de la ciudad un niño semidiós de 12 años?
Este mundo de fantasía es una mezcolanza de ciudad moderna con la aparición de elementos religioso culturales grecolatinos (los dioses), y del género de aventuras y de ciencia ficción (monstruos, demonios y tecnología).
Se trata de una lectura rápida (para mi gusto demasiado), sin dobles lecturas, sin desarrollo ni demasiado andamiaje. Todo directo, con poco texto, acción y diálogos cortos. Rubín en El Héroe consigue una simbiosis perfecta de esos elementos, desarrollando el nivel básico y construyendo a partir de él. Aquí sólo se encuentra el nivel básico...para mi pequeña decepción...
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