Acabó una de las más inteligentes, interesantes, potentes y seguramente (se verá con el tiempo) recordadas etapas del comic mainstream de superhéroes de todos los tiempos.
Sin dibujantes hot de renombre (pero más que capaces, desde luego) y con un guionista en estado de gracia que ha volcado todo su inmenso talento en la serie, el resultado no podía ser más fresco y emocionante.
Con esta etapa concluída, Fraction se ha hecho con los mandos de las dos colecciones actuales, dando otro aire más clásico y convencional principalmente a Fantastic Four (con los magníficos Bagley y Farmer en los interiores) y jugando más con la espontaneidad, el surrealismo y la inventiva en FF (con un magnífico Allred, que seguro que mete mano en los guiones).
Dos etapas diferentes con dos enfoques diferentes, que sin embargo siguen demostrando que la primera familia de Marvel sigue en plena forma.
2 comentarios:
Totalmente de acuerdo, una etapa genial. Una relectura del tiron dentro de un tiempo la hara mejor aun.
;)
Sí, tengo ganas de releerla entera y del tirón..
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