Leonard McCoy, por Byrne

Mi primera aproximación al universo Star Trek en los comics no ha podido ser más afortunada.
Obviamente el acercamiento lo ha propiciado John Byrne, autor clásico por excelencia, del que tanto y tan bueno he leído desde la infancia (y algunas cosas no tan interesantes, claro, pero ¿quién puede hacerlo todo bien siempre?).

Sin ser algo realmente espectacular o imprescindible, Byrne firma un más que notable trabajo, tanto en lo gráfico (fondos trabajados y detallados como hacía tiempo no los veia en su trabajo) como sobre todo en el guión, con un acercamiento similar al que planteó en el relanzamiento de Superman: Las aventuras del Doctor le llevan a mundos muy distintos, en los que se le plantean problemas sin aparente solución que tendrá que resolver la mayoría de las veces no solo para ayudar a la población residente, sino también para salvar la propia vida. Los acertijos funcionan y crean una tensión que se complementa a la perfección por el tono de la serie y la interacción de los personajes secundarios con el principal.

Otro punto a favor es que sin apenas saber nada de la serie galáctica, se puede disfrutar de su lectura sin problemas, ganando puntos con detalles de la serie para los habituales de la saga.

Desde luego no me importaría nada seguir leyendo este tipo de trabajos de la mano de Byrne.
Una buena noticia para los que esperamos con ansiedad la nueva etapa de sus estupendos Next Men.