La película de Edward Zwick -recién estrenada esta semana-, funciona a varios niveles:
Al mismo tiempo que narra acontecimientos reales que forman parte de la Historia de la Humanidad (la situación en Bielorrusia tras la invasión alemana de 1941), nos cuenta en primera persona la relación de una familia de hermanos bielorrusos judíos a los que el conflicto alcanzó muy de cerca. Pese a las más de dos horas de metraje y a su pausa rítmica en ciertos tramos, no se hace excesiva ni lenta.
Los protagonistas principales hacen gala de su buen hacer interpretativo(especialmente Daniel Craig y Liev Schreiber), modificando su acento y forma de hablar para hacer más creíbles a sus personajes.
Una nueva aproximación al Segundo Conflicto Mundial que muestra otras caras y maneras de afrontar la terrible ola de locura y monstruosidad que el hombre puede crear contra el hombre. La película no sólo muestra el horror de forma parcial. Muestra también cómo aquellos que han sido vilipendiados, expulsados, rechazados, cazados y llevados al límite de su humanidad en nombre del sinsentido, se transforman también en monstruos que vomitan el dolor recibido sobre el primer blanco indefenso que cae en sus redes.
Una buena recomendación para ver en las pantallas.
3 comentarios:
Aunque es difícl innovar en las películas de esta temática, me gustó cómo construían una nueva sociedad dentro del bosque y los conflictos que surgían.
¡Saludos!
Sí, tiene lo suficiente como para no salir pensando que es otra película más.
Un abrazo!
Me gustó mucho, y moló verla en VOS pero en mi opinión anda algo falta de ritmo
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